IoT y 5G

IoT y 5G

El Internet de las cosas (IoT) es el proceso que permite conectar elementos físicos cotidianos al Internet: desde objetos domésticos comunes, como las bombillas de luz, hasta recursos para la atención de la salud, como los dispositivos médicos; también abarca prendas y accesorios personales inteligentes e incluso los sistemas de las ciudades inteligentes.

¿Cómo funciona?

El término IoT hace referencia a todos los sistemas de dispositivos físicos que reciben y transfieren datos a través de redes inalámbricas con intervención humana mínima, lo cual es posible gracias a la integración de dispositivos informáticos en todo tipo de objetos.

Un sistema de IoT tradicional, como el hogar inteligente descrito anteriormente, funciona enviando, recibiendo y analizando datos de forma permanente en un ciclo de retroalimentación. Según el tipo de tecnología de IoT, las personas o los sistemas de inteligencia artificial y aprendizaje automático (IA/ML) pueden analizar estos datos casi de inmediato o durante un cierto tiempo.
Piense en el ejemplo del hogar inteligente. Para predecir el momento ideal en el cual controlar el termostato antes de que usted llegue a casa, el sistema de IoT puede conectarse a la API de Google Maps y, de este modo, obtener información actual sobre el tráfico en el área. Además, puede utilizar los datos a largo plazo que recopila el automóvil para conocer sus hábitos de conducción. Por otra parte, las empresas de servicios públicos tienen la posibilidad de analizar los datos de IoT de los clientes con termostatos inteligentes para optimizar el sistema a gran escala.

IoT empresarial

Por lo general, el IoT capta la atención de los consumidores, cuyas experiencias con tecnologías como los relojes inteligentes se ven afectadas por las preocupaciones en torno a la seguridad y la privacidad que supone el hecho de estar conectados de forma permanente. Esta perspectiva se aplica a todos los tipos de proyectos de IoT empresarial, especialmente cuando el usuario final es el público en general.

Las soluciones de IoT para empresas les permiten mejorar los modelos comerciales actuales y entablar nuevas relaciones con los clientes y socios de negocio. No obstante, su implementación presenta ciertos desafíos. El volumen de datos que genera un sistema de dispositivos inteligentes (lo cual se conoce como Big Data) puede volverse abrumador. Integrar el Big Data a los sistemas actuales y establecer análisis para poder utilizar esa información puede resultar complicado.

Además, la seguridad es un aspecto muy importante a la hora de diseñar sistemas de IoT. Aun así, muchas empresas consideran que implementar esta tecnología vale la pena; por eso, es posible encontrar casos prácticos exitosos en casi todos los sectores.

Evolución hacia el 5G

El avance de la Transformación Digital y la evolución de tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT), la Inteligencia Artificial y el Big Data, además del aumento del uso de dispositivos móviles ha exigido un mayor desempeño del Internet. Sin embargo, la conexión con la web no ha alcanzado aún su potencial, pero tiende a hacerse cada vez más rápida para satisfacer esas nuevas demandas que están surgiendo a lo largo de los años, con la llegada del 5G.

El Internet de las Cosas, que es cada vez más indispensable para las empresas, funciona solamente cuando hay conexión de los dispositivos con el Internet. Con base en ello, ya podemos imaginar la importancia del 5G para el avance del IoT en los próximos años.

Al ser la primera red planeada para actuar con baja latencia y tiempo de respuesta 10 veces más corto que la red 4G, el 5G es la solución que promete conectar de forma más eficiente vehículos autónomos, refrigeradores inteligentes, edificios conectados, entre incontables posibilidades.

El número de dispositivos IoT conectados crece aceleradamente todos los días en todo el mundo y las redes tradicionales ya no son suficientes para transmitir la grande cantidad de datos que se están generando a todo momento. Por esto, el 5G surge como una solución capaz de absorber estas conexiones simultáneas, de forma eficiente y con menor consumo de energía. Es una red programada para dar respuesta en tiempo real, además de ser escalable y versátil.

El 4G fue una evolución del 3G, con una banda más ancha y mayor velocidad, pero con el mismo ecosistema, por otro lado, el 5G tiene una nueva programación, la cual pretende habilitar toda una serie de usos que salen de este ecosistema.

 


Créditos: redhat.com | digital.la.synnex.com

 

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